La vida está llena de cosas lindas, pero, muchas veces, no sabemos disfrutarlas. Uno de los vicios más frecuentes que no nos dejan ser felices es el de apegarnos, aferrarnos a ciertas cosas. Estamos disfrutando de algo o de alguien, pero el temor de perderlo nos provoca una tristeza, una angustia sincera. Pero podemos alcanzar la libertad interior, que es algo muy bello y agradable. Caminando por la vida desprendidos de todo, sueltos, sin cargas, en las espaldas, sin apegos en el corazón , sin obsesiones que nos dominen.
Eso nos permite vivir a fondo cada cosa de nuestra existencia, cada momento, cada pequeño placer, valorando lo que Dios nos da sin quejas ni lamentos.
La libertad interior es la fuente de la paz y de la alegría, nos dice el autor.
Formato : 10 x 19.5
Páginas : 77
Peso : 0.240 kg.