SALTAPAREDES

El adolescente de un nuevo siglo tendrá que ser un saltaparedes. Es urgente que los adolescentes despierten y recuperen la fuerza del lanzamiento que caracterizó a las jóvenes generaciones de todos los tiempos. Es necesario que se arrojen sobre las murallas construidas intencionadamente por esta loca sociedad, que tiene acorralada la creatividad, la buena rebeldía, los sentimientos, los proyectos, los sueños… ¿No es fascinante que nuestros chicos dejen de ser pequeños para transformarse en grandes saltaparedes?

Analía Ghío

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