La misericordia del hombre sólo alcanza a su prójimo, pero la misericordia del Señor alcanza a todos los hombres (Eclo 18,13).
Este es el tema de fondo que resuena a lo largo de las páginas de este libro del R Alurralde, benedictino de Santa María de Los Toldos. Invitar a la alegría y a la paz, confirmar en la fe, la esperanza y caridad, son tareas de todo cristiano.
Con una fe pascual adulta y un corazón sonriente, el autor logra inquietare interpelar al lector.
Partiendo de sus vivencias como médico, monje y sacerdote, contempla con mirada asombrada la gratificante experiencia de un peregrinar de días y de huellas...