PASTORAL DE LA SALUD

La Pastoral de la Salud no está destinada solo a los enfermos, sino también a las familias, a los profesionales y a la comunidad entera. Por eso, requiere –de parte de los agentes pastorales- creatividad para interpretar una variedad de roles según los contextos; habilidad comunicativa para relacionarse bien con las personas; competencia emocional para saber escuchar y acompañar en los momentos de fragilidad y capacidad de trabajar en equipo para resolver los múltiples problemas que se presentan.
Estas páginas ofrecen distintas miradas desde las cuales comprender y encarar el complejo mundo de la salud y la enfermedad. En la medida en que los agentes de salud se formen para acercarse con delicadeza y sabiduría a las debilidades humanas, pueden convertirse en educadores y monitores, capacitados para visitar y consolar a los enfermos en nombre de la comunidad cristiana.

Arnaldo Pangrazzi

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